Megan Denise Fox tiene ascendencia nativa estadounidense,
francesa e irlandesa. Nació en Oak Ridge, Tennessee como hija de Darlene y
Franklin Fox. Los padres de Megan se divorciaron cuando ella era muy joven, y
ella y su hermana fueron educadas por su madre y su padre adoptivo Tony
Tonachio bajo los principios de la fe Protestante. Megan dice que ambos fueron
muy estrictos, y que no le dejaban tener novio, o invitar amigos a casa y vivió
con su madre hasta que pudo reunir el suficiente dinero para poder mantenerse
por si misma.
Megan comienza sus estudios de interpretación y danza a los
cinco años en Kingston (Ténesi). Asistió a clases de baile en el Centro
Comunitario y asistió también al coro del colegio y al equipo de natación del
Kingston Clippers. A la edad de 10 años, después de mudarse a San Petersburgo
(Florida), continuó sus estudios hasta los 13 años, cuando empezó a destacar
como modelo. Después de ganar varios certámenes en 1999 en American Modeling y
Talent Convention in Hilton Head, South Carolina. A los 17 años intenta irse
del colegio para poder mudarse a Los Ángeles.
En 2011 la actriz realizó unas declaraciones para la revista
The Hollywood Reporter, donde afirmó que fue un patito feo de joven:
"Nunca fui la chica guapa del colegio, con la que los chicos quisieran
salir. Llevaba aparatos en la boca y me teñía el pelo de color naranja. No era
de las populares, más bien era solitaria. Llegué al mundo del estrellato por
otros motivos", aseguró.
Fox relató a El Mundo: "Habían unas chicas malísimas en
mi colegio, por eso me fui a un instituto cristiano. Tenía 15 años y todas
sabían que quería ser actriz. Una de ellas se vistió de cuero negro y decía
para burlarse de mí: Soy Megan Fox". Megan dice también que en el
instituto, nunca fue popular, y que "todo el mundo me odiaba, y era un
completo desastre, mis amigos eran chicos, y tenía una personalidad muy
agresiva, y por eso las chicas no me querían. Únicamente he tenido una amiga en
toda mi vida